El equipo compuesto por jugadores vascos y navarros se alzó con la victoria del prestigioso Gran Prix de Waterpolo Ciudad de México celebrado en la capital azteca tras vencer en la final a Puerto Rico en los penalti.

Euskal Herria volvió a América para proseguir con su idilio con el continente tras las victorias obtenidas en Venezuela 2007 y Perú 2015.

Una expedición para el recuerdo. Así se puede definir el viaje que llevó al waterpolo vasco-navarro a disputar el Gran Prix Ciudad de México en la piscina del Comité Olímpico para enfrentarse en un triangular con la selección azteca y Puerto Rico. Ambos países con la preparación en mente de los Juegos Centroamericanos y del Caribe que tendrán lugar en Barranquilla (Colombia) el próximo 19 de julio.

Los trece jugadores dirigidos por Joan Albella y César Mendibil lograron comenzar con buen pie en el torneo tras vencer a los anfitriones por 7-10 donde hubo un reparto equitativo de los goles por parte de Euskal Herria con hasta 6 jugadores que encontraron diana.

El segundo partido el combinado vasco-navarro acusó la diferencia respecto al juego practicado en Europa y Puerto Rico obtuvo la victoria por 10-12 en un partido bronco donde incluso un jugador puertorriqueño fue expulsado. México por su parte, venció a Puerto Rico por 12-11 pero la diferencia de goles, hizo que Euskal Herria volviese a verse las caras con los boricuas.

La final fue un escenario muy parecido a la de Lima 2015 frente a Colombia. Después de ir ganando todo el partido, un último cuarto condena a los nuestros a los penaltis. Al igual que en Lima 2015, donde todo quedó en manos de los arqueros, el nuestro en esta ocasión detuvo dos de ellos.

Visitas culturales

No todo fue waterpolo. Hubo dos visitas culturales programadas. La primera de ellas a la Pirámide del Sol en la antigua ciudad de Teotihuacán Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1987. La segunda visita, ya tradicional desde Venezuela 2007 es la visita a la Euskal Etxea, lugar de referencia de los emigrantes vascos en América.